El jueves 23 de octubre tuvo lugar en Barcelona un encuentro de networking y promoción de proyectos emprendedores. Una cincuentena de empresas de nueva creación pudo explicar sus ideas y a la vez buscar posibles colaboradores y alianzas.
El marco escogido para el evento fue el claustro del Convent de Sant Agustí, en el que al aire libre se organizaron distintas actividades –‘elevators pitch’ en clave de ‘speed dating’, actuaciones en vivo, demostraciones y exposiciones– para las 49 empresas inscritas.
Organizado por Barcelona Activa, CP’AC (Fundació Privada per a la Promoció de l’Autoocupació de Catalunya) y Deloitte, el encuentro se presentaba con la pregunta “¿Qué mejor forma de crear networking y conocer nuevos proyectos que participando en un Market Place?”. Y a esta propuesta se animaron iniciativas empresariales de alimentación, turismo, hostelería, tecnología, vivienda, comunicación, comercio, salud y educación.
Mientras sobre el escenario se alternaban las presentaciones orales de cada empresa –sobrias algunas, con coloristas e imaginativas puestas en escenas otras–, las cinco grandes mesas distribuidas por el patio mostraban los distintos productos y servicios.
Así, encontrabas propuestas gastronómicas de exposición, taller y cata como la del Museu Gastronòmic; productos de alimentación artesanales innovadores como los ofrecidos por La Celestial Delicatessen; servicios de impresión 3D como el de Tresdenou; consultoría de mantenimiento de instalaciones como la de Revolutiu; video y fotografía para la promoción de empresas como la de Aurea Films; formación y promoción del ski alpino con apoyo de tecnologías de la comunicación como el de Ski Time; o teatralización y canto de cuentos para escuelas y parvularios como el de la Companyia Nyiguit, por citar sólo algunos de estos casi 50 proyectos, que ya han dejado de ser proyectos para convertirse en realidades.
En definitiva, un encuentro de actividades de todo tipo, desde las más artesanales a las más tecnológicas, en un espacio en el que coincidieron el entusiasmo, la ilusión, el orgullo y el positivismo, todos ellos elementos clave en cualquier proyecto de emprendimiento.
